وَلَقَدۡ عَلِمۡتُمُ ٱلَّذِينَ ٱعۡتَدَوۡاْ مِنكُمۡ فِي ٱلسَّبۡتِ فَقُلۡنَا لَهُمۡ كُونُواْ قِرَدَةً خَٰسِـِٔينَ
Y, en verdad, conocéis (lo que les ocurrió) a quienes de entre vosotros profanaban la ley del sábado[1]. Les dijimos: «Convertíos en unos monos despreciables».
1- Al-lah castigó a los judíos que salían a pescar en sábado, a pesar de que lo tenían prohibido (ver la aleya 163 de la sura 7). Esos judíos que no respetaron la ley fueron convertidos en monos y cerdos, y perecieron pocos días después sin dejar descendencia. Los cerdos y los monos que existen hoy en día no son, pues, descendientes de los que recibieron el castigo de Al-lah, sino que son parte de la creación de Al-lah, como el resto de los animales. El castigo que Al-lah infligió sobre quienes Lo desobedecieron es una muestra de Su poder y de que Él puede dar al hombre la forma que quiera.
وَرَفَعۡنَا فَوۡقَهُمُ ٱلطُّورَ بِمِيثَٰقِهِمۡ وَقُلۡنَا لَهُمُ ٱدۡخُلُواْ ٱلۡبَابَ سُجَّدٗا وَقُلۡنَا لَهُمۡ لَا تَعۡدُواْ فِي ٱلسَّبۡتِ وَأَخَذۡنَا مِنۡهُم مِّيثَٰقًا غَلِيظٗا
Y elevamos el monte sobre ellos (en señal de amenaza) para que cumplieran el pacto que habíamos concertado con ellos y les dijimos: «Entrad en la ciudad postrándoos humildemente[1]»; y les dijimos: «No violéis la ley del sábado[2]». Y tomamos de ellos un firme compromiso.
1- Ver la aleya 58 de la sura 2.
2- Ver la aleya 65 de la sura 2.
وَسۡـَٔلۡهُمۡ عَنِ ٱلۡقَرۡيَةِ ٱلَّتِي كَانَتۡ حَاضِرَةَ ٱلۡبَحۡرِ إِذۡ يَعۡدُونَ فِي ٱلسَّبۡتِ إِذۡ تَأۡتِيهِمۡ حِيتَانُهُمۡ يَوۡمَ سَبۡتِهِمۡ شُرَّعٗا وَيَوۡمَ لَا يَسۡبِتُونَ لَا تَأۡتِيهِمۡۚ كَذَٰلِكَ نَبۡلُوهُم بِمَا كَانُواْ يَفۡسُقُونَ
Y pregúntales (a los judíos) acerca de la ciudad que estaba a orillas del mar cuando profanaban la ley del sábado (según la cual ese día tenían prohibido pescar o trabajar); los sábados los peces acudían (a la orilla) dejándose ver con claridad, mientras que cuando no era sábado no se acercaban (a ella). Así es como los poníamos a prueba por rebelarse a las órdenes de Al-lah (y negarse a obedecerlo).
وَإِذۡ قَالَتۡ أُمَّةٞ مِّنۡهُمۡ لِمَ تَعِظُونَ قَوۡمًا ٱللَّهُ مُهۡلِكُهُمۡ أَوۡ مُعَذِّبُهُمۡ عَذَابٗا شَدِيدٗاۖ قَالُواْ مَعۡذِرَةً إِلَىٰ رَبِّكُمۡ وَلَعَلَّهُمۡ يَتَّقُونَ
Y cuando un grupo (de quienes no profanaban el sábado) preguntaron (a quienes amonestaban a los transgresores): «¿Por qué exhortáis a quienes Al-lah destruirá y castigará severamente?», estos contestaron: «Para que nuestro Señor nos exima de toda culpa (por haberles ordenado el bien y prohibido el mal) y para que, tal vez, teman (a Al-lah y se arrepientan)».
فَلَمَّا نَسُواْ مَا ذُكِّرُواْ بِهِۦٓ أَنجَيۡنَا ٱلَّذِينَ يَنۡهَوۡنَ عَنِ ٱلسُّوٓءِ وَأَخَذۡنَا ٱلَّذِينَ ظَلَمُواْ بِعَذَابِۭ بَـِٔيسِۭ بِمَا كَانُواْ يَفۡسُقُونَ
Y cuando olvidaron la amonestación, salvamos a quienes prohibían el mal[1] y castigamos severamente a los injustos por haberse rebelado (contra Nuestras órdenes).
1- Cabe resaltar que la aleya no menciona qué sucede con quienes obraban bien pero no exhortaban a quienes pecaban para que temieran a Al-lah. Cuando Al-lah castiga a un pueblo por su maldad, quienes obran rectamente pueden sufrir también el castigo en esta vida si no tratan de impedir y prohibir el mal (ver la aleya 25 de la sura 8 y las notas de la sura 103).
فَلَمَّا عَتَوۡاْ عَن مَّا نُهُواْ عَنۡهُ قُلۡنَا لَهُمۡ كُونُواْ قِرَدَةً خَٰسِـِٔينَ
Y cuando persistieron en lo que se les había prohibido, les dijimos: «Convertíos en unos monos[1] despreciables».
1- Ver la nota de pie de la aleya 65 de la sura 2.
إِنَّمَا جُعِلَ ٱلسَّبۡتُ عَلَى ٱلَّذِينَ ٱخۡتَلَفُواْ فِيهِۚ وَإِنَّ رَبَّكَ لَيَحۡكُمُ بَيۡنَهُمۡ يَوۡمَ ٱلۡقِيَٰمَةِ فِيمَا كَانُواْ فِيهِ يَخۡتَلِفُونَ
Y a los judíos se les impuso la observación del sábado como día sagrado tras haber discrepado sobre el día que debían consagrar (a Al-lah para adorarlo)[1]. Ciertamente, tu Señor los juzgará el Día de la Resurrección por los asuntos sobre lo que discrepaban.
1- Al parecer, Al-lah prescribió el viernes a los judíos para que lo consagraran a Su adoración, pero ellos discreparon con Moisés —la paz de Al-lah esté con él— y escogieron el sábado en vez del viernes; por este motivo Al-lah les impuso entonces mantener el sábado con rigurosidad.