أُحِلَّ لَكُمۡ لَيۡلَةَ ٱلصِّيَامِ ٱلرَّفَثُ إِلَىٰ نِسَآئِكُمۡۚ هُنَّ لِبَاسٞ لَّكُمۡ وَأَنتُمۡ لِبَاسٞ لَّهُنَّۗ عَلِمَ ٱللَّهُ أَنَّكُمۡ كُنتُمۡ تَخۡتَانُونَ أَنفُسَكُمۡ فَتَابَ عَلَيۡكُمۡ وَعَفَا عَنكُمۡۖ فَٱلۡـَٰٔنَ بَٰشِرُوهُنَّ وَٱبۡتَغُواْ مَا كَتَبَ ٱللَّهُ لَكُمۡۚ وَكُلُواْ وَٱشۡرَبُواْ حَتَّىٰ يَتَبَيَّنَ لَكُمُ ٱلۡخَيۡطُ ٱلۡأَبۡيَضُ مِنَ ٱلۡخَيۡطِ ٱلۡأَسۡوَدِ مِنَ ٱلۡفَجۡرِۖ ثُمَّ أَتِمُّواْ ٱلصِّيَامَ إِلَى ٱلَّيۡلِۚ وَلَا تُبَٰشِرُوهُنَّ وَأَنتُمۡ عَٰكِفُونَ فِي ٱلۡمَسَٰجِدِۗ تِلۡكَ حُدُودُ ٱللَّهِ فَلَا تَقۡرَبُوهَاۗ كَذَٰلِكَ يُبَيِّنُ ٱللَّهُ ءَايَٰتِهِۦ لِلنَّاسِ لَعَلَّهُمۡ يَتَّقُونَ
Se os permiten las relaciones íntimas con vuestras esposas durante las noches del mes de ayuno. Ellas son un refugio[1] para vosotros y vosotros, un refugio para ellas. Al-lah sabe que os traicionabais a vosotros mismos (porque os uníais a ellas por las noches cuando lo teníais prohibido con anterioridad). Pero Al-lah ha aceptado vuestro arrepentimiento y os ha perdonado. Ahora podéis mantener relaciones íntimas con ellas y buscar lo que Al-lah ha decretado para vosotros[2].Y comed y bebed hasta que el primer destello del alba rompa la noche. Después continuad el ayuno hasta el anochecer. Pero no os unáis a vuestras esposas si estáis retirados en las mezquitas para adorar a Al-lah[3]. Estas son las leyes que Al-lah establece; no las quebrantéis, pues. Así es como Al-lah aclara Sus mandatos a los hombres para que puedan ser piadosos.
1- Literalmente, la aleya dice: «Ellas son una vestimenta para vosotros y vosotros, una vestimenta para ellas». No obstante, el término «vestimenta» —en árabe libas—posee un significado muy amplio, e incluye la protección que los esposos se ofrecen mutuamente en todos los sentidos y la necesidad del uno por el otro, pues la pareja debe ser un refugio donde hallar apoyo y tranquilidad.
2- Puede hacer referencia a la descendencia o bien a lo que ha permitido dentro de las relaciones sexuales.
3- Es muy frecuente retirarse a una mezquita durante los últimos días de ramadán para dedicarlos exclusivamente a adorar a Al-lah, aunque, de hecho, este tipo de retiro voluntario puede realizarse en cualquier momento del año y puede durar los días que se deseen. No obstante, quien lo practica no debe abandonar la mezquita, salvo por una necesidad. Algunos compañeros del Profeta —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz— aprovechaban una salida por la noche para mantener relaciones con sus esposas antes de que esta aleya fuera revelada prohibiéndolo.
وَيَسۡـَٔلُونَكَ عَنِ ٱلۡمَحِيضِۖ قُلۡ هُوَ أَذٗى فَٱعۡتَزِلُواْ ٱلنِّسَآءَ فِي ٱلۡمَحِيضِ وَلَا تَقۡرَبُوهُنَّ حَتَّىٰ يَطۡهُرۡنَۖ فَإِذَا تَطَهَّرۡنَ فَأۡتُوهُنَّ مِنۡ حَيۡثُ أَمَرَكُمُ ٱللَّهُۚ إِنَّ ٱللَّهَ يُحِبُّ ٱلتَّوَّـٰبِينَ وَيُحِبُّ ٱلۡمُتَطَهِّرِينَ
Y te preguntan (¡oh, Muhammad!) acerca de la menstruación. Diles: «Es algo impuro, así que alejaos de (mantener relaciones íntimas con) vuestras mujeres durante sus periodos hasta que estén limpias. Y cuando se hayan purificado (con un baño completo o gusul) uníos a ellas como Al-lah os ordena[1]. En verdad, Al-lah ama a quienes se vuelven constantemente a Él en arrepentimiento y a quienes se purifican.
1- Por la vía natural.
نِسَآؤُكُمۡ حَرۡثٞ لَّكُمۡ فَأۡتُواْ حَرۡثَكُمۡ أَنَّىٰ شِئۡتُمۡۖ وَقَدِّمُواْ لِأَنفُسِكُمۡۚ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّكُم مُّلَٰقُوهُۗ وَبَشِّرِ ٱلۡمُؤۡمِنِينَ
Vuestras mujeres son un campo de siembra[1] para vosotros; id, pues, a vuestro campo como y cuando os plazca y obrad rectamente[2] (evitando lo que Al-lah os ha prohibido). Temed a Al-lah y sabed que compareceréis ante Él. Y da la buena noticia (del paraíso) a los creyentes (que obedecen a Al-lah y que se abstienen de lo que Él prohíbe, ¡oh, Muhammad!).
1- Aquí se utiliza una metáfora para hacer referencia al tema de la concepción y la procreación; del mismo modo que el hombre siembra el campo, deposita la semilla de su descendencia en el útero de la mujer.
2- También puede entenderse «realizad una buena acción (mencionando el nombre de Al-lah para que Él bendiga la unión y proteja del Demonio a los esposos y a su posible descendencia)».
وَٱلۡمُطَلَّقَٰتُ يَتَرَبَّصۡنَ بِأَنفُسِهِنَّ ثَلَٰثَةَ قُرُوٓءٖۚ وَلَا يَحِلُّ لَهُنَّ أَن يَكۡتُمۡنَ مَا خَلَقَ ٱللَّهُ فِيٓ أَرۡحَامِهِنَّ إِن كُنَّ يُؤۡمِنَّ بِٱللَّهِ وَٱلۡيَوۡمِ ٱلۡأٓخِرِۚ وَبُعُولَتُهُنَّ أَحَقُّ بِرَدِّهِنَّ فِي ذَٰلِكَ إِنۡ أَرَادُوٓاْ إِصۡلَٰحٗاۚ وَلَهُنَّ مِثۡلُ ٱلَّذِي عَلَيۡهِنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِۚ وَلِلرِّجَالِ عَلَيۡهِنَّ دَرَجَةٞۗ وَٱللَّهُ عَزِيزٌ حَكِيمٌ
Las mujeres divorciadas deberán guardar un tiempo de espera de tres menstruaciones (antes de volver a casarse). Durante ese tiempo no les está permitido ocultar lo que Al-lah ha creado en sus vientres (si están embarazadas), si de verdad creen en Al-lah y en el Día de la Resurrección. Y sus esposos tienen pleno derecho a volver con ellas durante dicho periodo, si deciden la reconciliación. Ellas tienen sobre ellos derechos similares a los que ellos tienen sobre ellas, según lo reconocido; pero ellos están un grado por encima de ellas[1]. Y Al-lah es Poderoso y Sabio.
1- Los hombres y las mujeres tienen derechos y obligaciones proporcionalmente semejantes, pero no idénticos. Así pues, por ejemplo, la mujer tiene derecho a ser mantenida y a que sus necesidades económicas queden cubiertas por el marido, mientras que ello es una obligación para el hombre. La razón por la que los hombres están un grado por encima de ellas se debe a que ellos son sus protectores y responsables y quienes las mantienen.
ٱلطَّلَٰقُ مَرَّتَانِۖ فَإِمۡسَاكُۢ بِمَعۡرُوفٍ أَوۡ تَسۡرِيحُۢ بِإِحۡسَٰنٖۗ وَلَا يَحِلُّ لَكُمۡ أَن تَأۡخُذُواْ مِمَّآ ءَاتَيۡتُمُوهُنَّ شَيۡـًٔا إِلَّآ أَن يَخَافَآ أَلَّا يُقِيمَا حُدُودَ ٱللَّهِۖ فَإِنۡ خِفۡتُمۡ أَلَّا يُقِيمَا حُدُودَ ٱللَّهِ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡهِمَا فِيمَا ٱفۡتَدَتۡ بِهِۦۗ تِلۡكَ حُدُودُ ٱللَّهِ فَلَا تَعۡتَدُوهَاۚ وَمَن يَتَعَدَّ حُدُودَ ٱللَّهِ فَأُوْلَـٰٓئِكَ هُمُ ٱلظَّـٰلِمُونَ
El divorcio (de la misma mujer) podrá ser (revocado) dos veces. Luego deberá tomarla nuevamente por esposa y tratarla bien o deberá dejarla libre de buena manera. No os está permitido tomar nada de los bienes que les disteis a ellas como maher[1] (al casaros), salvo si ambas partes temen no cumplir las leyes que Al-lah establece. Si teméis que no se respeten dichas leyes, ninguno incurrirá en falta si ella decide darle parte (para obtener el divorcio). Estas son las leyes de Al-lah, no las quebrantéis, pues. Quienes lo hagan, esos serán los injustos.
1- El maher suele traducirse tradicionalmente como dote; sin embargo hay grandes diferencias entre ambos conceptos. El maher consiste en unos bienes —normalmente oro en la actualidad— que el esposo debe obligatoriamente regalar a la esposa cuando oficializan el contrato de matrimonio. Este presente es una muestra de la generosidad y de la disposición y capacidad del hombre para mantener a su esposa y satisfacer sus necesidades económicas. A veces, en Occidente, se malinterpreta maliciosamente y se piensa que de esta manera el esposo compra a la esposa. Hay que resaltar que estos bienes no los ofrece el esposo a los padres de la esposa, sino a ella, y nadie más que ella tiene el derecho de hacer uso de esos bienes. No hay una cantidad mínima estipulada y lo recomendable es que el maher se adapte a las posibilidades del esposo. La dote, no obstante, consiste en unos bienes o dinero que la esposa aporta al matrimonio —no son, pues, solamente para ella— y que provienen de sus propios padres y familiares más cercanos.
وَإِذَا طَلَّقۡتُمُ ٱلنِّسَآءَ فَبَلَغۡنَ أَجَلَهُنَّ فَأَمۡسِكُوهُنَّ بِمَعۡرُوفٍ أَوۡ سَرِّحُوهُنَّ بِمَعۡرُوفٖۚ وَلَا تُمۡسِكُوهُنَّ ضِرَارٗا لِّتَعۡتَدُواْۚ وَمَن يَفۡعَلۡ ذَٰلِكَ فَقَدۡ ظَلَمَ نَفۡسَهُۥۚ وَلَا تَتَّخِذُوٓاْ ءَايَٰتِ ٱللَّهِ هُزُوٗاۚ وَٱذۡكُرُواْ نِعۡمَتَ ٱللَّهِ عَلَيۡكُمۡ وَمَآ أَنزَلَ عَلَيۡكُم مِّنَ ٱلۡكِتَٰبِ وَٱلۡحِكۡمَةِ يَعِظُكُم بِهِۦۚ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ بِكُلِّ شَيۡءٍ عَلِيمٞ
Y cuando divorciéis a vuestras mujeres y su tiempo de espera esté próximo a expirar, o bien las retenéis y las tratáis con benevolencia, o bien las dejáis libres de buena manera (una vez finalizado el plazo). Pero no las retengáis a la fuerza para perjudicarlas. Y quien lo haga habrá sido injusto consigo mismo (por haber desobedecido a Al-lah). No os burléis de los mandatos de Al-lah y recordad las gracias que os ha concedido, así como el Libro (el Corán) y la sabiduría (el entendimiento de la religión y la tradición del Profeta) que os ha otorgado y con los que os exhorta. Temed a Al-lah y sabed que Él tiene conocimiento sobre todas las cosas.
وَإِذَا طَلَّقۡتُمُ ٱلنِّسَآءَ فَبَلَغۡنَ أَجَلَهُنَّ فَلَا تَعۡضُلُوهُنَّ أَن يَنكِحۡنَ أَزۡوَٰجَهُنَّ إِذَا تَرَٰضَوۡاْ بَيۡنَهُم بِٱلۡمَعۡرُوفِۗ ذَٰلِكَ يُوعَظُ بِهِۦ مَن كَانَ مِنكُمۡ يُؤۡمِنُ بِٱللَّهِ وَٱلۡيَوۡمِ ٱلۡأٓخِرِۗ ذَٰلِكُمۡ أَزۡكَىٰ لَكُمۡ وَأَطۡهَرُۚ وَٱللَّهُ يَعۡلَمُ وَأَنتُمۡ لَا تَعۡلَمُونَ
Y una vez hayáis divorciado a vuestras mujeres (por primera o segunda vez) y estas hayan cumplido su tiempo de espera, que (los familiares de ellas) no les impidan casarse de nuevo con quienes eran sus esposos si ambos llegan a un acuerdo de manera razonable. Con esto se exhorta a quienes de vosotros creen en Al-lah y en el Día de la Resurrección. Esto es más apropiado y más puro para vosotros. Y Al-lah sabe, mientras que vosotros no sabéis.
۞وَٱلۡوَٰلِدَٰتُ يُرۡضِعۡنَ أَوۡلَٰدَهُنَّ حَوۡلَيۡنِ كَامِلَيۡنِۖ لِمَنۡ أَرَادَ أَن يُتِمَّ ٱلرَّضَاعَةَۚ وَعَلَى ٱلۡمَوۡلُودِ لَهُۥ رِزۡقُهُنَّ وَكِسۡوَتُهُنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِۚ لَا تُكَلَّفُ نَفۡسٌ إِلَّا وُسۡعَهَاۚ لَا تُضَآرَّ وَٰلِدَةُۢ بِوَلَدِهَا وَلَا مَوۡلُودٞ لَّهُۥ بِوَلَدِهِۦۚ وَعَلَى ٱلۡوَارِثِ مِثۡلُ ذَٰلِكَۗ فَإِنۡ أَرَادَا فِصَالًا عَن تَرَاضٖ مِّنۡهُمَا وَتَشَاوُرٖ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡهِمَاۗ وَإِنۡ أَرَدتُّمۡ أَن تَسۡتَرۡضِعُوٓاْ أَوۡلَٰدَكُمۡ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ إِذَا سَلَّمۡتُم مَّآ ءَاتَيۡتُم بِٱلۡمَعۡرُوفِۗ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ بِمَا تَعۡمَلُونَ بَصِيرٞ
Y las madres divorciadas que quieran completar el tiempo de lactancia amamantarán a sus hijos durante dos años completos. Al padre le corresponderá la manutención y la vestimenta de la madre según sus recursos. A nadie se le exige por encima de sus posibilidades. Ni la madre ni el padre deberán verse perjudicados por causa del hijo. Y la misma obligación (la de la manutención de la madre y el no perjudicarla) recaerá sobre el heredero del padre (o bien sobre sus familiares más cercanos en la ausencia de este). Y si ambos progenitores deciden destetar al niño de mutuo acuerdo, tras consultarlo entre ellos, no cometen ninguna falta. Y si deseáis que otra mujer amamante a vuestro hijo, no incurrís en pecado si concedéis (a la madre sus derechos acordados por haberse hecho cago del niño con anterioridad) y pagáis (a la nodriza) según lo acordado. Y temed a Al-lah y sabed que Él ve todo lo que hacéis.
وَٱلَّذِينَ يُتَوَفَّوۡنَ مِنكُمۡ وَيَذَرُونَ أَزۡوَٰجٗا يَتَرَبَّصۡنَ بِأَنفُسِهِنَّ أَرۡبَعَةَ أَشۡهُرٖ وَعَشۡرٗاۖ فَإِذَا بَلَغۡنَ أَجَلَهُنَّ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ فِيمَا فَعَلۡنَ فِيٓ أَنفُسِهِنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِۗ وَٱللَّهُ بِمَا تَعۡمَلُونَ خَبِيرٞ
Las viudas deberán aguardar un plazo de espera de cuatro meses y diez días (antes de volver a embellecerse y a casarse). Una vez terminado el plazo, vosotros (sus familiares y custodios), no incurrís en falta alguna por lo que ellas dispongan de sí mismas (con respecto a volver a adornarse y a comprometerse) de manera razonable (si respetan la ley de Al-lah). Y Al-lah está bien informado de lo que hacéis.
وَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ فِيمَا عَرَّضۡتُم بِهِۦ مِنۡ خِطۡبَةِ ٱلنِّسَآءِ أَوۡ أَكۡنَنتُمۡ فِيٓ أَنفُسِكُمۡۚ عَلِمَ ٱللَّهُ أَنَّكُمۡ سَتَذۡكُرُونَهُنَّ وَلَٰكِن لَّا تُوَاعِدُوهُنَّ سِرًّا إِلَّآ أَن تَقُولُواْ قَوۡلٗا مَّعۡرُوفٗاۚ وَلَا تَعۡزِمُواْ عُقۡدَةَ ٱلنِّكَاحِ حَتَّىٰ يَبۡلُغَ ٱلۡكِتَٰبُ أَجَلَهُۥۚ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ يَعۡلَمُ مَا فِيٓ أَنفُسِكُمۡ فَٱحۡذَرُوهُۚ وَٱعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ غَفُورٌ حَلِيمٞ
No cometéis ninguna falta si les dejáis entrever (antes de que finalice su plazo de espera) vuestra intención de casaros con ellas o si la ocultáis en vuestro interior; Al-lah sabe que pensaréis en ellas. Pero noos comprometáis con ellas en secreto, sino habladles de manera honorable (insinuándoles indirectamente vuestra intención o comunicándosela a sus familiares). Y no formalicéis el contrato de matrimonio hasta que haya concluido el plazo de espera. Sabed que Al-lah conoce lo que escondéis en vuestro interior, así que temedle. Y sabed que Al-lah es Indulgente y Tolerante.
وَٱلَّذِينَ يُتَوَفَّوۡنَ مِنكُمۡ وَيَذَرُونَ أَزۡوَٰجٗا وَصِيَّةٗ لِّأَزۡوَٰجِهِم مَّتَٰعًا إِلَى ٱلۡحَوۡلِ غَيۡرَ إِخۡرَاجٖۚ فَإِنۡ خَرَجۡنَ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ فِي مَا فَعَلۡنَ فِيٓ أَنفُسِهِنَّ مِن مَّعۡرُوفٖۗ وَٱللَّهُ عَزِيزٌ حَكِيمٞ
Y a las viudas les corresponde, como legado, el derecho a ser mantenidas (por los familiares del marido) y a permanecer en la casa conyugal durante un año lunar completo[1]. Pero, si ellas abandonan el hogar voluntariamente, vosotros (los familiares del difunto marido) no seréis reprochados por lo que ellas hagan de manera razonable (siempre que se respete la ley de Al-lah). Y Al-lah es Poderoso y Sabio.
1- Este precepto sería derogado posteriormente tras la revelación de la aleya que especifica la herencia que debe recibir la mujer (aleya 12 de la sura 4); y el duelo o tiempo de espera de la viuda antes de volver a embellecerse y casarse pasaría a ser de cuatro meses y diez días, en vez de un año.
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُوٓاْ إِذَا تَدَايَنتُم بِدَيۡنٍ إِلَىٰٓ أَجَلٖ مُّسَمّٗى فَٱكۡتُبُوهُۚ وَلۡيَكۡتُب بَّيۡنَكُمۡ كَاتِبُۢ بِٱلۡعَدۡلِۚ وَلَا يَأۡبَ كَاتِبٌ أَن يَكۡتُبَ كَمَا عَلَّمَهُ ٱللَّهُۚ فَلۡيَكۡتُبۡ وَلۡيُمۡلِلِ ٱلَّذِي عَلَيۡهِ ٱلۡحَقُّ وَلۡيَتَّقِ ٱللَّهَ رَبَّهُۥ وَلَا يَبۡخَسۡ مِنۡهُ شَيۡـٔٗاۚ فَإِن كَانَ ٱلَّذِي عَلَيۡهِ ٱلۡحَقُّ سَفِيهًا أَوۡ ضَعِيفًا أَوۡ لَا يَسۡتَطِيعُ أَن يُمِلَّ هُوَ فَلۡيُمۡلِلۡ وَلِيُّهُۥ بِٱلۡعَدۡلِۚ وَٱسۡتَشۡهِدُواْ شَهِيدَيۡنِ مِن رِّجَالِكُمۡۖ فَإِن لَّمۡ يَكُونَا رَجُلَيۡنِ فَرَجُلٞ وَٱمۡرَأَتَانِ مِمَّن تَرۡضَوۡنَ مِنَ ٱلشُّهَدَآءِ أَن تَضِلَّ إِحۡدَىٰهُمَا فَتُذَكِّرَ إِحۡدَىٰهُمَا ٱلۡأُخۡرَىٰۚ وَلَا يَأۡبَ ٱلشُّهَدَآءُ إِذَا مَا دُعُواْۚ وَلَا تَسۡـَٔمُوٓاْ أَن تَكۡتُبُوهُ صَغِيرًا أَوۡ كَبِيرًا إِلَىٰٓ أَجَلِهِۦۚ ذَٰلِكُمۡ أَقۡسَطُ عِندَ ٱللَّهِ وَأَقۡوَمُ لِلشَّهَٰدَةِ وَأَدۡنَىٰٓ أَلَّا تَرۡتَابُوٓاْ إِلَّآ أَن تَكُونَ تِجَٰرَةً حَاضِرَةٗ تُدِيرُونَهَا بَيۡنَكُمۡ فَلَيۡسَ عَلَيۡكُمۡ جُنَاحٌ أَلَّا تَكۡتُبُوهَاۗ وَأَشۡهِدُوٓاْ إِذَا تَبَايَعۡتُمۡۚ وَلَا يُضَآرَّ كَاتِبٞ وَلَا شَهِيدٞۚ وَإِن تَفۡعَلُواْ فَإِنَّهُۥ فُسُوقُۢ بِكُمۡۗ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَۖ وَيُعَلِّمُكُمُ ٱللَّهُۗ وَٱللَّهُ بِكُلِّ شَيۡءٍ عَلِيمٞ
¡Oh, creyentes!, si contraéis una deuda por un plazo determinado, que uno de vosotros que sepa escribir lo ponga por escrito. Y quien lo haga que sea justo y que no se niegue a hacerlo después de que Al-lah le enseñara (la escritura). Que escriba, pues, con temor de Al-lah, su Señor, y que no reduzca en nada la deuda; y que le dicte quien la contrae. Y si este fuera ignorante o débil mentalmente y no pudiera dictar, que lo haga en su lugar su tutor con equidad. Y tomad a dos hombres de entre vosotros como testigos, y si no hubiera dos hombres disponibles, tomad a un hombre y a dos mujeres[1] que aceptéis como testigos; si una de ellas se equivocara, la otra podría recordárselo (y subsanar el error). Y que los testigos no se nieguen a comparecer si son llamados. Y no dejéis de poner la deuda por escrito, ya sea esta pequeña o grande, indicando su vencimiento. Eso es lo más justo para Al-lah, la mejor prueba y la manera más segura de evitar dudas entre vosotros. No obstante, si se trata de una transacción comercial entre vosotros realizada en el acto, no cometéis falta alguna si no la ponéis por escrito, pero recurrid a testigos para cualquier transacción. Ni quienes ponen las deudas por escrito ni los testigos deberán verse presionados. Y si los presionáis, será un acto de desobediencia de vuestra parte. Temed a Al-lah; y Al-lah es Quien os enseña (lo que más os conviene). Y Al-lah tiene conocimiento sobre todas las cosas.
1- En el islam, como norma general, el testimonio de una mujer tiene el mismo valor que el testimonio de un hombre. Hay, no obstante, situaciones en las que solo se acepta el testimonio de la mujer, y otras en las que el testimonio de un hombre vale por el de dos mujeres juntas. Esta última situación se da en transacciones económicas, como es el caso de esta aleya. Ello se debe a que las responsabilidades económicas familiares recaen en el hombre y no en la mujer, y por ello es de suponer que los hombres tengan más experiencia que las mujeres en este tipo de asuntos.
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ لَا يَحِلُّ لَكُمۡ أَن تَرِثُواْ ٱلنِّسَآءَ كَرۡهٗاۖ وَلَا تَعۡضُلُوهُنَّ لِتَذۡهَبُواْ بِبَعۡضِ مَآ ءَاتَيۡتُمُوهُنَّ إِلَّآ أَن يَأۡتِينَ بِفَٰحِشَةٖ مُّبَيِّنَةٖۚ وَعَاشِرُوهُنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِۚ فَإِن كَرِهۡتُمُوهُنَّ فَعَسَىٰٓ أَن تَكۡرَهُواْ شَيۡـٔٗا وَيَجۡعَلَ ٱللَّهُ فِيهِ خَيۡرٗا كَثِيرٗا
¡Oh, creyentes!, no os está permitido heredar a las mujeres contra su voluntad (como hacíais antes del islam)[1], ni debéis tratarlas con dureza para que os den parte del maher que les disteis (a cambio de concederles el divorcio), a menos que hayan cometido adulterio (pues en este caso sí podéis presionarlas para que os den el maher que les concedisteis cuando las desposasteis). Y tratadlas bien. Y si las detestáis (sed pacientes), pues puede que detestéis algo en lo que Al-lah ha depositado mucho bien.
1- Previamente al islam, cuando un hombre moría, sus parientes varones eran libres de hacerlo que quisieran con la viuda: podían casarse con ella o casarla con alguien o impedir que se casara con quien ella quisiera, pues tenían más derechos sobre ella que su propia familia.
وَإِنۡ أَرَدتُّمُ ٱسۡتِبۡدَالَ زَوۡجٖ مَّكَانَ زَوۡجٖ وَءَاتَيۡتُمۡ إِحۡدَىٰهُنَّ قِنطَارٗا فَلَا تَأۡخُذُواْ مِنۡهُ شَيۡـًٔاۚ أَتَأۡخُذُونَهُۥ بُهۡتَٰنٗا وَإِثۡمٗا مُّبِينٗا
Y si queréis remplazar a una esposa por otra (divorciando a la primera) y le disteis a esta una gran suma de dinero (como maher), no toméis nada de lo que le entregasteis. ¿Lo tomaríais sabiendo que cometéis una injusticia y un claro pecado?
وَلَا تَنكِحُواْ مَا نَكَحَ ءَابَآؤُكُم مِّنَ ٱلنِّسَآءِ إِلَّا مَا قَدۡ سَلَفَۚ إِنَّهُۥ كَانَ فَٰحِشَةٗ وَمَقۡتٗا وَسَآءَ سَبِيلًا
Y no desposéis a las mujeres que tuvieron vuestros padres, salvo si lo hicisteis en el pasado[1] (pues estáis perdonados por ello). Ciertamente, eso es una indecencia, una ofensa y una mala costumbre.
1- En la época previa al islam.
حُرِّمَتۡ عَلَيۡكُمۡ أُمَّهَٰتُكُمۡ وَبَنَاتُكُمۡ وَأَخَوَٰتُكُمۡ وَعَمَّـٰتُكُمۡ وَخَٰلَٰتُكُمۡ وَبَنَاتُ ٱلۡأَخِ وَبَنَاتُ ٱلۡأُخۡتِ وَأُمَّهَٰتُكُمُ ٱلَّـٰتِيٓ أَرۡضَعۡنَكُمۡ وَأَخَوَٰتُكُم مِّنَ ٱلرَّضَٰعَةِ وَأُمَّهَٰتُ نِسَآئِكُمۡ وَرَبَـٰٓئِبُكُمُ ٱلَّـٰتِي فِي حُجُورِكُم مِّن نِّسَآئِكُمُ ٱلَّـٰتِي دَخَلۡتُم بِهِنَّ فَإِن لَّمۡ تَكُونُواْ دَخَلۡتُم بِهِنَّ فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ وَحَلَـٰٓئِلُ أَبۡنَآئِكُمُ ٱلَّذِينَ مِنۡ أَصۡلَٰبِكُمۡ وَأَن تَجۡمَعُواْ بَيۡنَ ٱلۡأُخۡتَيۡنِ إِلَّا مَا قَدۡ سَلَفَۗ إِنَّ ٱللَّهَ كَانَ غَفُورٗا رَّحِيمٗا
Se os prohíben (en matrimonio): vuestras madres, vuestras hijas, vuestras hermanas, vuestras tías paternas y maternas, vuestras sobrinas por parte de hermano o hermana, vuestras madres y hermanas de leche, las madres de vuestras esposas y las hijas de vuestras esposas que estén bajo vuestro cuidado (así como las que no lo estén) si habéis consumado el matrimonio con vuestras esposas; pero, si aún no lo habéis consumado, no cometéis ningún pecado (si os casáis con sus hijas). También (os están prohibidas en matrimonio) las esposas de vuestros hijos biológicos[1] y casaros con dos hermanas a la vez, salvo si lo hicisteis en el pasado (en la época previa al islam). Ciertamente, Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
1- Quedan excluidas de esta prohibición las esposas de los hijos adoptivos, ya que el islam no reconoce la adopción tal y como se practicaba con anterioridad. El islam permite acoger a niños o tutelarlos, pero estos deben conservar los apellidos de sus padres verdaderos, si se conocen, y no pueden llevar el de la familia que los acoge ni son herederos legítimos.
۞وَٱلۡمُحۡصَنَٰتُ مِنَ ٱلنِّسَآءِ إِلَّا مَا مَلَكَتۡ أَيۡمَٰنُكُمۡۖ كِتَٰبَ ٱللَّهِ عَلَيۡكُمۡۚ وَأُحِلَّ لَكُم مَّا وَرَآءَ ذَٰلِكُمۡ أَن تَبۡتَغُواْ بِأَمۡوَٰلِكُم مُّحۡصِنِينَ غَيۡرَ مُسَٰفِحِينَۚ فَمَا ٱسۡتَمۡتَعۡتُم بِهِۦ مِنۡهُنَّ فَـَٔاتُوهُنَّ أُجُورَهُنَّ فَرِيضَةٗۚ وَلَا جُنَاحَ عَلَيۡكُمۡ فِيمَا تَرَٰضَيۡتُم بِهِۦ مِنۢ بَعۡدِ ٱلۡفَرِيضَةِۚ إِنَّ ٱللَّهَ كَانَ عَلِيمًا حَكِيمٗا
Y (se os prohíben también) las mujeres casadas, excepto las cautivas de guerra[1] (a través de un nuevo contrato). Esto es un mandato de Al-lah. Se os permiten el resto de las mujeres si les entregáis unos bienes como maher con la intención de casaros con ellas, no para mantener con ellas relaciones ilícitas. Y ya que vais a gozar de ellas (en matrimonio) entregadles el maher que os ha sido ordenado (por Al-lah). No cometéis ninguna falta si ambos acordáis una cantidad distinta después de la estipulada (ya sea esta mayor o bien ella renuncie a una parte). En verdad, Al-lah es Omnisciente y Sabio.
1- El matrimonio de las mujeres que estaban casadas con hombres idólatras y son tomadas como cautivas en una batalla pierde su validez y los musulmanes pueden casarse con ellas, si lo desean, tras la espera de una menstruación para asegurarse de que no están embarazadas.Era una práctica de la época que las mujeres estuviesen presentes cerca del campo de batalla para evitar que sus maridos huyesen, porque, si lo hacían, podían perder a sus familias, ya que están pasaban a ser propiedad de los vencedores. Por esta razón también había cautivas de guerra aunque las mujeres no lucharan.
وَمَن لَّمۡ يَسۡتَطِعۡ مِنكُمۡ طَوۡلًا أَن يَنكِحَ ٱلۡمُحۡصَنَٰتِ ٱلۡمُؤۡمِنَٰتِ فَمِن مَّا مَلَكَتۡ أَيۡمَٰنُكُم مِّن فَتَيَٰتِكُمُ ٱلۡمُؤۡمِنَٰتِۚ وَٱللَّهُ أَعۡلَمُ بِإِيمَٰنِكُمۚ بَعۡضُكُم مِّنۢ بَعۡضٖۚ فَٱنكِحُوهُنَّ بِإِذۡنِ أَهۡلِهِنَّ وَءَاتُوهُنَّ أُجُورَهُنَّ بِٱلۡمَعۡرُوفِ مُحۡصَنَٰتٍ غَيۡرَ مُسَٰفِحَٰتٖ وَلَا مُتَّخِذَٰتِ أَخۡدَانٖۚ فَإِذَآ أُحۡصِنَّ فَإِنۡ أَتَيۡنَ بِفَٰحِشَةٖ فَعَلَيۡهِنَّ نِصۡفُ مَا عَلَى ٱلۡمُحۡصَنَٰتِ مِنَ ٱلۡعَذَابِۚ ذَٰلِكَ لِمَنۡ خَشِيَ ٱلۡعَنَتَ مِنكُمۡۚ وَأَن تَصۡبِرُواْ خَيۡرٞ لَّكُمۡۗ وَٱللَّهُ غَفُورٞ رَّحِيمٞ
Y aquel que de vosotros no disponga de medios para casarse con mujeres creyentes libres que se case con jóvenes creyentes de entre vuestras esclavas. Al-lah conoce perfectamente vuestra fe, provenís los unos de los otros (y sois iguales ante Al-lah en la religión). Y casaos con el permiso de sus amos y dadles su maher como es debido; y que sean decentes, no promiscuas ni de las que toman amantes. Y si después de casarse cometen adulterio, recibirán la mitad del castigo que les corresponde a las mujeres libres. Esto es para aquellos de vosotros que teman caer en la fornicación (si no se casan), pero es mejor para vosotros ser pacientes (hasta que dispongáis de los medios para casaros con mujeres libres). Y Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
وَلَا تَتَمَنَّوۡاْ مَا فَضَّلَ ٱللَّهُ بِهِۦ بَعۡضَكُمۡ عَلَىٰ بَعۡضٖۚ لِّلرِّجَالِ نَصِيبٞ مِّمَّا ٱكۡتَسَبُواْۖ وَلِلنِّسَآءِ نَصِيبٞ مِّمَّا ٱكۡتَسَبۡنَۚ وَسۡـَٔلُواْ ٱللَّهَ مِن فَضۡلِهِۦٓۚ إِنَّ ٱللَّهَ كَانَ بِكُلِّ شَيۡءٍ عَلِيمٗا
Y no anheléis lo que Al-lah ha concedido a unos favoreciéndolos más que a otros[1]. Los hombres tendrán la recompensa que sus obras merezcan y las mujeres también obtendrán la recompensa que sus acciones merezcan. Y pedidle a Al-lah de Su favor. Ciertamente, Al-lah tiene conocimiento sobre todas las cosas.
1- Puede interpretarse que los hombres no deben desear lo que Al-lah ha concedido de manera especial a las mujeres, ni las mujeres deben desear las gracias que Al-lah ha concedido a los hombres, pues Él ha otorgado a cada sexo lo que más le conviene, en cuanto a características, derechos y deberes.
ٱلرِّجَالُ قَوَّـٰمُونَ عَلَى ٱلنِّسَآءِ بِمَا فَضَّلَ ٱللَّهُ بَعۡضَهُمۡ عَلَىٰ بَعۡضٖ وَبِمَآ أَنفَقُواْ مِنۡ أَمۡوَٰلِهِمۡۚ فَٱلصَّـٰلِحَٰتُ قَٰنِتَٰتٌ حَٰفِظَٰتٞ لِّلۡغَيۡبِ بِمَا حَفِظَ ٱللَّهُۚ وَٱلَّـٰتِي تَخَافُونَ نُشُوزَهُنَّ فَعِظُوهُنَّ وَٱهۡجُرُوهُنَّ فِي ٱلۡمَضَاجِعِ وَٱضۡرِبُوهُنَّۖ فَإِنۡ أَطَعۡنَكُمۡ فَلَا تَبۡغُواْ عَلَيۡهِنَّ سَبِيلًاۗ إِنَّ ٱللَّهَ كَانَ عَلِيّٗا كَبِيرٗا
Los hombres son los responsables de proteger, guiar y velar por las necesidades de las mujeres porque Al-lah ha favorecido al hombre por encima de la mujer (para algunas actividades) y porque ellos las mantienen con sus bienes. Consecuentemente, las mujeres virtuosas deben ser obedientes y deben proteger (su honor y las propiedades del marido) en la ausencia de este, como Al-lah les ha ordenado. Y a aquellas de quienes temáis rebeldía y mala conducta (porque se muestran arrogantes y no respetan a sus maridos cuando ellos no han cometido ninguna falta contra ellas), amonestadlas (primero), no compartáis el lecho con ellas (si la medida anterior no les hace desistir) y tomad medidas físicas[1] (como última opción y sin buscar lastimarlas). Pero si os obedecen, no toméis medidas contra ellas. En verdad, Al-lah es Excelso y Grande (y tomará represalias contra vosotros si las tratáis injustamente).
1- La permisibilidad de pegar ligeramente a la mujer no es ni para dañarla ni para humillarla, sino que es más bien un gesto simbólico de autoridad para hacer que ella entre en razón solamente si el hombre cree que esa medida puede funcionar y evitar un mal mayor, como es el divorcio. El islam condena la violencia contra la mujer y le concede el derecho al divorcio si sufre maltrato. De hecho, el Profeta —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz— nunca pegó a ninguna de sus mujeres y consideraba que los mejores hombres de la sociedad eran aquellos que mejor trataban a sus mujeres, y él mismo decía: «El mejor de vosotros es el mejor con su familia y yo soy el mejor de vosotros con su familia» Ibn Jibban (4186). Y en su último sermón durante la peregrinación dijo: «Vosotros tenéis derechos sobre vuestras esposas y vuestras esposas tienen derechos sobre vosotros. Tratad a vuestras esposas con amor y gentileza». Otros dichos suyos sobre el tema son: «Los creyentes que muestran la más perfecta fe son aquellos que tienen buen carácter y el mejor de entre vosotros es aquel que sea más bueno con su mujer»,(Tirmidhi); «El mejor de entre vosotros no pega a su mujer, y yo soy el mejor de entre vosotros»; «¿Acaso podría uno de vosotros golpear a su mujer como golpearía a un esclavo, y luego se acostaría con ella por la noche?», etc.
۞وَٱعۡبُدُواْ ٱللَّهَ وَلَا تُشۡرِكُواْ بِهِۦ شَيۡـٔٗاۖ وَبِٱلۡوَٰلِدَيۡنِ إِحۡسَٰنٗا وَبِذِي ٱلۡقُرۡبَىٰ وَٱلۡيَتَٰمَىٰ وَٱلۡمَسَٰكِينِ وَٱلۡجَارِ ذِي ٱلۡقُرۡبَىٰ وَٱلۡجَارِ ٱلۡجُنُبِ وَٱلصَّاحِبِ بِٱلۡجَنۢبِ وَٱبۡنِ ٱلسَّبِيلِ وَمَا مَلَكَتۡ أَيۡمَٰنُكُمۡۗ إِنَّ ٱللَّهَ لَا يُحِبُّ مَن كَانَ مُخۡتَالٗا فَخُورًا
Y adorad solamente a Al-lah; y tratad bien a vuestros padres, a vuestros parientes, a los huérfanos, a los pobres, a los vecinos que sean familiares vuestros y a los que no los sean, a los compañeros de viaje, a los viajeros y a los esclavos. En verdad, Al-lah no ama a los presuntuosos y arrogantes;
وَيَسۡتَفۡتُونَكَ فِي ٱلنِّسَآءِۖ قُلِ ٱللَّهُ يُفۡتِيكُمۡ فِيهِنَّ وَمَا يُتۡلَىٰ عَلَيۡكُمۡ فِي ٱلۡكِتَٰبِ فِي يَتَٰمَى ٱلنِّسَآءِ ٱلَّـٰتِي لَا تُؤۡتُونَهُنَّ مَا كُتِبَ لَهُنَّ وَتَرۡغَبُونَ أَن تَنكِحُوهُنَّ وَٱلۡمُسۡتَضۡعَفِينَ مِنَ ٱلۡوِلۡدَٰنِ وَأَن تَقُومُواْ لِلۡيَتَٰمَىٰ بِٱلۡقِسۡطِۚ وَمَا تَفۡعَلُواْ مِنۡ خَيۡرٖ فَإِنَّ ٱللَّهَ كَانَ بِهِۦ عَلِيمٗا
Te preguntan (¡oh, Muhammad!) acerca (de asuntos legales relacionados con) las mujeres. Diles: «Al-lah os instruye al respecto y acerca de lo que el Libro (el Corán) os revela sobre las jóvenes huérfanas con las que queréis casaros sin darles la parte (del maher y de la herencia)que les corresponde[1], y acerca de los niños débiles y oprimidos; y (os ordena) ser justos con los huérfanos». Y todo bien que hagáis será del conocimiento de Al-lah.
1- Antes de la llegada del islam, el tutor de una huérfana podía casarse con ella para no darle su debido maher o podía impedir que se casara con alguien para heredar él, tras la muerte de esta, todos sus bienes. También se les negaba a las mujeres y a los niños la parte de la herencia que les correspondía. Esta aleya condena tales prácticas y defiende los derechos de las mujeres y de los niños.
وَإِنِ ٱمۡرَأَةٌ خَافَتۡ مِنۢ بَعۡلِهَا نُشُوزًا أَوۡ إِعۡرَاضٗا فَلَا جُنَاحَ عَلَيۡهِمَآ أَن يُصۡلِحَا بَيۡنَهُمَا صُلۡحٗاۚ وَٱلصُّلۡحُ خَيۡرٞۗ وَأُحۡضِرَتِ ٱلۡأَنفُسُ ٱلشُّحَّۚ وَإِن تُحۡسِنُواْ وَتَتَّقُواْ فَإِنَّ ٱللَّهَ كَانَ بِمَا تَعۡمَلُونَ خَبِيرٗا
Y si una mujer teme que su marido pierda interés en ella o la rechace (porque ya no se siente atraído por ella), no comete ninguna falta, como tampoco su marido, si ambos llegan a un acuerdo (para evitar el divorcio y continuar viviendo juntos a cambio de que ella renuncie a parte de sus derechos). Y el acuerdo es lo mejor, a pesar de que el ser humano tiende, por naturaleza, a quererlo todo y a no ceder nada. Mas si hacéis el bien (tratando bien a vuestras esposas) y teméis (a Al-lah evitando ser injustos con ellas), (sabed que) Él está bien informado de lo que hacéis (y os recompensará por ello).
وَلَن تَسۡتَطِيعُوٓاْ أَن تَعۡدِلُواْ بَيۡنَ ٱلنِّسَآءِ وَلَوۡ حَرَصۡتُمۡۖ فَلَا تَمِيلُواْ كُلَّ ٱلۡمَيۡلِ فَتَذَرُوهَا كَٱلۡمُعَلَّقَةِۚ وَإِن تُصۡلِحُواْ وَتَتَّقُواْ فَإِنَّ ٱللَّهَ كَانَ غَفُورٗا رَّحِيمٗا
Y jamás podréis ser justos con vuestras mujeres por igual (en lo referente a vuestros sentimientos), aunque lo intentéis con todas vuestras fuerzas. No os inclinéis demasiado hacia una de ellas descuidando a otra. Mas si las tratáis con equidad (en todo aquello que esté en vuestras manos) y teméis a Al-lah, (sabed que) entonces Al-lah es Indulgente y Misericordioso.
۞هُوَ ٱلَّذِي خَلَقَكُم مِّن نَّفۡسٖ وَٰحِدَةٖ وَجَعَلَ مِنۡهَا زَوۡجَهَا لِيَسۡكُنَ إِلَيۡهَاۖ فَلَمَّا تَغَشَّىٰهَا حَمَلَتۡ حَمۡلًا خَفِيفٗا فَمَرَّتۡ بِهِۦۖ فَلَمَّآ أَثۡقَلَت دَّعَوَا ٱللَّهَ رَبَّهُمَا لَئِنۡ ءَاتَيۡتَنَا صَٰلِحٗا لَّنَكُونَنَّ مِنَ ٱلشَّـٰكِرِينَ
Él es Quien os creó (la primera vez) a partir de un solo ser (Adán) y creó de él a su pareja para que conviviera con ella y encontrara en ella refugio y sosiego.Y cuando (el hombre) cubre[1] a la mujer esta concibe una carga ligera al principio y (el embarazo) prosigue su curso. Pero cuando la carga se vuelve pesada, ambos (temen por su futuro hijo y) ruegan a Al-lah, su Señor, diciendo: «Si nos das un hijo sano, seremos de los agradecidos».
1- Se refiere a cuando el hijo de Adán o el hombre mantiene relaciones sexuales con su mujer.
قَالَ رَبِّ ٱلسِّجۡنُ أَحَبُّ إِلَيَّ مِمَّا يَدۡعُونَنِيٓ إِلَيۡهِۖ وَإِلَّا تَصۡرِفۡ عَنِّي كَيۡدَهُنَّ أَصۡبُ إِلَيۡهِنَّ وَأَكُن مِّنَ ٱلۡجَٰهِلِينَ
(José) invocó a Al-lah diciendo: «¡Señor!, prefiero la cárcel a lo que me piden; y si no apartas de mí lo que traman, cederé y seré de los ignorantes».
وَيَجۡعَلُونَ لِلَّهِ ٱلۡبَنَٰتِ سُبۡحَٰنَهُۥ وَلَهُم مَّا يَشۡتَهُونَ
Y atribuyen hijas a Al-lah[1], ¡glorificado y exaltado sea!, pues Él está por encima de lo que Le atribuyen,mientras que ellos se asignan para sí lo que desean(los hijos varones).
1- Los idólatras decían que los ángeles eran hijas de Al-lah; sin embargo, ellos mismos no deseaban tener hijas y preferían tener hijos varones.
وَإِذَا بُشِّرَ أَحَدُهُم بِٱلۡأُنثَىٰ ظَلَّ وَجۡهُهُۥ مُسۡوَدّٗا وَهُوَ كَظِيمٞ
Y si a alguno se le anuncia el nacimiento de una niña, su rostro se ensombrece y se siente apesadumbrado,
يَتَوَٰرَىٰ مِنَ ٱلۡقَوۡمِ مِن سُوٓءِ مَا بُشِّرَ بِهِۦٓۚ أَيُمۡسِكُهُۥ عَلَىٰ هُونٍ أَمۡ يَدُسُّهُۥ فِي ٱلتُّرَابِۗ أَلَا سَآءَ مَا يَحۡكُمُونَ
se oculta de la gente por la mala noticia que ha recibido y duda acerca de dejarla vivir, a pesar de la vergüenza (que siente), o de enterrarla viva[1]. ¡Qué malo es lo que deciden (los idólatras al atribuir hijas a Al-lah, cuando ellos las desprecian y prefieren a los varones)!
1- La situación de la mujer en la Arabia preislámica era pésima: apenas gozaban de derechos; no podían heredar, mientras que podían formar parte de la herencia; algunas tribus enterraban a las niñas al nacer por miedo a que llevasen la deshonra a sus familias (al ser violadas o hechas esclavas por los enemigos), y también por miedo a la pobreza; estaban poco consideradas porque eran un gasto económico y no proporcionaban ningún beneficio económico a la familia, como tampoco servían para la guerra. El islam elevó la posición de la mujer concediéndole derechos de acuerdo con su naturaleza (ver la nota 228 de la aleya 2). Además prohibió la antigua práctica de asesinar a las niñas enterrándolas vivas y ensalzó el papel de la mujer como madre (el Profeta —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz— dijo que el paraíso está a los pies de la madre), a la vez que alentó a cuidar a las hijas. (Dijo también el Profeta —que Al-lah lo bendiga y le dé la paz—: «Quien cuide a dos hijas hasta su madurez, llegará al Día de la Resurrección conmigo así», y unió sus dedos para ilustrar sus palabras).
إِلَّا عَلَىٰٓ أَزۡوَٰجِهِمۡ أَوۡ مَا مَلَكَتۡ أَيۡمَٰنُهُمۡ فَإِنَّهُمۡ غَيۡرُ مَلُومِينَ
salvo con sus esposas y con las esclavas que poseen[1], pues no serán reprochados por ello.
1- Ver la segunda nota de la aleya 3 de la sura 4.